lunes, 4 de junio de 2012

INTERNET, INFORMACION Y CONOCIMIENTO


El 21 de noviembre de 1969, las Universidades de Stanford y UCLA, se conectan por primera vez en una red informática para transmitirse entre ellos un correo electrónico. Para tan importante logro utilizaron un proyecto encargado por el Ministerio de la Defensa de los Estados Unidos de Norteamérica llamado: “Advanced Research Projects Agency Network” (ARPANET). De esta manera se dio inicio a un proceso que actualmente se conoce mediante el nombre de “Word Wide Web” o simplemente “Internet”.

El surgimiento de este poderoso instrumento ha causado una verdadera conmoción mundial al mover las bases que sustentan las formas tradicionales del aprendizaje y la manera de ver el mundo. A cada segundo surgen miles de noticias y datos, que inundan a la red, sin embargo nunca como antes, están a disposición de los investigadores de los distintos campos del saber, la información especializada que antes era de exclusivo conocimiento de unos pocos.

Así como el siglo XIX y la primera mitad del XX, se puede decir, que la producción industrial es el motor del crecimiento económico, actualmente, esta situación esta cediendo grandes espacios a los servicios y a la generación de información técnica muy especializada. Como bien lo dice la UNESCO, en su estudio: “Hacia las sociedades del conocimiento”: “…lo que constituye una transformación revolucionaria no es tanto el rápido auge de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación –Internet y telefonía móvil, entre otras- como el recurso cada vez mayor a estos instrumentos por parte de proveedores de contenidos informáticos, educativos y culturales en los que los medios tienen un papel cada vez más considerable.” Lo revolucionario no es tanto la generación masiva de información sino su utilización en la generación de conocimiento.

Se hace necesario distinguir y marcar diferencia entre información y conocimiento, no son lo mismo. La información es un dato bruto, esto es, la materia prima para la generación del conocimiento. Por lo cual no sería muy descabellado definir a la información como un “no conocimiento”. La prueba de esto la proporciona la misma Internet ¿Cuanta información que se encuentra en ella se puede considerar como basura, inconveniente o en contra de los principios morales?. El conocimiento en cambio, en cualquier campo, permite a quien lo posee tener la capacidad de actuar intelectualmente  o físicamente. De esta forma, el conocimiento  es esencialmente una cuestión de capacidad cognitiva.

La información es efectivamente un instrumento del conocimiento, pero no es el conocimiento en si. La información que nace de deseo de intercambiar los conocimientos y de hacer más eficaz su transmisión, es una forma fija y estabilizada de estos que depende del tiempo y de su usuario: una noticia es “fresca” o no lo es. La información es en potencia una mercancía que se compra y se venden en un mercado y cuya economía se basa en la rareza, mientras que un conocimiento –pese a determinadas limitaciones: secreto de Estado y formas tradicionales de conocimientos esotéricos, por ejemplo –pertenece legítimamente a cualquier mente razonable, sin que ello contradiga la necesidad de proteger la propiedad intelectual. La excesiva importancia concedida a las informaciones con respecto a los conocimientos pone de manifiesto hasta qué punto nuestra relación con el saber se ha visto considerablemente  modificada por la difusión de los modelos de economía del conocimiento

Manuel Castells Viloria, sociólogo español, quien es considerado una de las más altas autoridades en la sociología asociada a la información, en referencia al tema nos comenta:”… Internet es la sociedad, expresa los procesos sociales, los intereses sociales, los valores sociales, las instituciones sociales. ¿Cuál es, pues, la especificidad de Internet, si es la sociedad?. La especificidad es que se constituye la base material y tecnológica de la sociedad red, es la infraestructura tecnológica y el medio organizativo que permite el desarrollo de una serie de nuevas formas de relación social que no tienen su origen en internet, que son frutos de una serie de cambios históricos que no podrían desarrollarse sin Internet. Esa sociedad red es la sociedad que yo analizo como una sociedad cuya estructura social está construida en torno a redes de información a partir de la tecnología de la información microelectrónica estructurada en Internet. Pero Internet en ese sentido no es simplemente una tecnología, es el medio de comunicación que constituye la forma organizativa de nuestras sociedades, es el equivalente a lo que fue la factoría en la era industrial ola gran corporación en la era industrial. Internet es el corazón de un nuevo paradigma sociotécnico que constituye en realidad la base material de nuestras vidas y de nuestras formas de relación, de trabajo y comunicación. Lo que hace Internet es procesar la virtualidad y transformarla en nuestra realidad, constituyendo la sociedad  red, que es la sociedad en que vivimos.” (Internet y la sociedad red.2001:13)

lunes, 28 de mayo de 2012

¿SENSACION O REALIDAD?


Hace pocos días el Banco Central de Venezuela presentó las cifras preliminares para el primer trimestre de 2012. Las mismas reflejan básicamente un crecimiento económico y una deceleración en el aumento de los precios.

Varias personas han manifestado reiteradamente sobre la incredulidad a estos resultados, aduciendo  que la sensación que tienen es todo lo contario. ¿Quién tiene la razón? ¿la sensación o la realidad? La respuesta es muy simple: ambos. Las cifras reflejan una realidad enmarcada en los parámetros forjados por una metodología internacionalmente aceptada y adoptada  a cargo de unos técnicos calificados y entrenados para su cálculo.

La cuestión es que en materia económica la sensación o percepción que se tiene sobre un evento es en muchos casos más importante que la realidad. No pongan cara de extrañeza y tengan un poco de paciencia, lo vamos a tratar de explicar con unos ejemplos.

En primer lugar veamos el caso del proceso inflacionario. Si las personas sienten, perciben o creen que los precios de los bienes y servicios seguirán en ascenso, tratarán de anticiparse a esta situación pidiendo aumento de sueldos, por ejemplo o si es un trabador independiente, ajustando sus honorarios, Esta situación encarecerá los costos de producción, presionando el aumento de los precios finales. En la literatura económica esto se conoce como inflación inercial o por expectativas.

Oteo caso que podemos mencionar es el del tipo de cambio ¿Cuántas veces ante el aumento del precio de un bien o servicio determinado? Nos han respondido para nuestra incredulidad, que el aumento es motivado a la devaluación de la moneda y, ¡ese bien no contiene ningún insumo importado!.

El de la escasez es otro ejemplo bandera de lo que puede causar la sensación o percepción. ¿Cuántas veces no ha corrido usted o a hecho una larga cola para adquirir un producto por el solo hecho de que usted o su familia cree que va a escasear. Lo que tarde o temprano se genera, producto de los mismos compradores.

Finalmente, señalaremos el más devastador de todos. La Sensación de inseguridad, ya sea jurídica o física. No importa si es real o no. Ya la existencia del temor no permite a las familias salir a divertirse en las noches, afectando a la industria del entretenimiento. El turismo, disminuye la inversión y el consumo privado, y pare usted de contar.

En todos los casos la solución es la misma, hay que cortar las expectativas, mostrando de manera CONVICENTE  la realidad. Hay que demostrar que no hay motivos para tener falsas sensaciones. ¡Cláro! esto no es tan sencillo, la credibilidad hay que ganársela. Si el río suena, demuestre que este no trae piedras y recuerde en economía la percepción es muchas veces más importante que la realidad.

domingo, 6 de mayo de 2012

MUCHO RUIDO


Y pocas nueces. Después de que se despertó una gran expectativa por la aprobación de la reforma de la Ley Orgánica del Trabajo, el presidente de la República, la firmó el pasado lunes 30 de abril y, aunque no se conocía el texto de la Ley, la pudimos leer al día siguiente gracias al ministro Izarra, quien, publicó a través de una de las redes sociales, un enlace donde se podía bajar e imprimir (Decreto 8.938 del 30 de  abril de 2012).

Una gran decepción nos causo la lectura, sinceramente no estuvo a la altura de las expectativas, por lo tanto decidimos, titular este articulo con el nombre de la famosa comedia de William Shakespeare: “Mucho ruido y pocas nueces” ¿Por qué?

En primer lugar no se ve por ningún lado la revolución socialista que tanto se pregona, en la cual se transformaría la relación entre los medios de producción, lo cual es un hecho económico y social, y no solamente social como se establece en el Art. 1º. Sin llegar a los comentarios de algunos expertos que dicen que es la misma Ley anterior con algunas modificaciones, si podemos afirmar que la Ley sigue siendo capitalista. De tal forma, que nos imaginamos que debe haber sido muy grande la decepción entre los seguidores del partido de Gobierno y que son snceros socialistas.

La jornada laboral se estableció con un máximo de 40 horas semanales, la reducción es solamente de cuatro horas, es decir hasta un máximo de 8 horas diarias, con dos días de descanso, por lo tanto, un trabajador puede laborar 8 horas diarias de lunes a viernes y descansar sábado y domingo. Si hay algo parecido a la realidad, es pura coincidencia.

Las mujeres y la familia, salieron bien parados, al aumentarse el período de permiso post natal a 26 semanas.

Ahora comentemos el asunto de la retroactividad de las prestaciones y su pago. En el artículo 142 se estableció una dualidad en que convivirán, la promesa  cumplida con la antigua forma de cálculo. Por lo tanto el Patrono debe depositar trimestralmente 15 días con “base al último salario devengado”. En la actualidad de depositan 5 días mensuales en base al último salario devengado. En ambos casos se depositan  gradualmente un adicional de 30 días. Por lo tanto el trabajador puede acumular un equivalente a 60 días de prestaciones por año. El artículo antes señalado, en el literal c, establece: “se calcularán las prestaciones sociales con base a treinta días por cada año de servicio o fracción superior a los seis meses calculada al último salario” y, finalmente en el literal d, se puede leer: El trabajador o trabajadora recibirá por concepto de prestaciones sociales el monto que resulte mayor entre el total de la garantía depositada de acuerdo a lo establecido en los literales a y b, y el cálculo efectuado al final de la relación laboral de acuerdo al literal c.

Los expertos en materia laboral que han estudiado el problema manifiestan que la retroactividad es ventajosa a partir del año 13. Sin embargo lo que es seguro es que si algún día elimina la inflación, lo que significa una estabilidad en los precios, lo cual haría innecesario los grandes aumentos de salario, el régimen anterior es muy superior al nuevo (60 días es superior a 30).

Nos pareció muy enredado y exagerado el tratamiento dada a la tercerización, pensamos que se  hubiese definido en forma claro el fenómeno y se hubiese prohibido su práctica. La definición que se lee en el Art 42, es muy ambiguo y oscuro: “A los efectos de esta Ley se entiende por tercerización la simulación o fraude cometido por patronos o patronas en general, con el propósito de desvirtuar, desconocer obstaculizar la aplicación de la legislación laboral”. Digan lo que digan, no se entiende esta definición.

Se puede decir que esta ley es buena, porque aumenta los beneficios y protecciones al trabajador y la familia, pero no es lo que se esperaba el segundo instrumento jurídico del país. Se perdió una gran oportunidad para trazar un camino que nos permita la modernidad y la entrada a una economía mundial globalizada y muy competitiva. “La revolución de la productividad  ya se agotó. La nueva era del trabajo implica la aplicación del conocimiento  como la nueva fuente de creación de valor y riqueza La sustitución de tierra trabajo y capital por el conocimiento traducido como valor, tecnología y oportunidad, cambiara completamente la dinámica de las empresas. El costo de la mano de obra, la materia prima, los insumos y otros costos asociados al proceso productivos serán cada día menos importantes”. (Valdes, Luigi.2002:18)  

domingo, 22 de abril de 2012

NO A LOS SUELDOS Y SALARIOS


No crean que nos volvimos locos y que estamos recomendando que no se ajusten los sueldos y salarios. En una economía inflacionaria como la nuestra, el mantenimiento del poder adquisitivo de nuestros ingresos es una necesidad, pero cualquier ajuste siempre será menor a la inflación dado el rezago que existe, los ajustes son anuales o en el mejor de los casos semestrales, el aumento de los precios se puede considerar que es diario. Todos los días se ajuste algún precio.
            Lo que queremos comentar es que en la actualidad una política económica seria se debe enfocar, en materia laboral, en la generación de puestos de trabajos dignos. Estudios recientes de la Universidad Católica Andrés Bello, han demostrado que la verdadera salida de la pobreza se encuentra en la generación de nuevos y buenos trabajos y no en la redistribución del ingreso.
            Es propio de la naturaleza humana alegrarse de recibir algún dinero extra que le permita adquirir algo que ha deseado  por mucho tiempo o que le permita cancelar algunas deudas. Pero nada se compara a la cara de felicidad que nos ilumina la cara cuando conseguimos un buen trabajo que nos genere un ingreso seguro cada quince y último (o semanal según sea el caso), que nos permita ahorrar, ya sea en una caja de ahorro o cualquier otro sistema, que nos facilite el acceso al sistema de salud y sobre todo, una vida digna en nuestra vejez.
            Un buen trabajo, necesariamente es formal. Por lo tanto, una política económica debe fomentar la formalidad, es decir la legalidad y esto debe pasar por facilitar la creación de nuevas empresas.
            Hemos referido en sucesivas ocasiones que la era industrial murió el siglo pasado para darle paso a la era del conocimiento y la alta tecnología. Los paradigmas laborales y las relaciones obrero patronales han cambiado, incluso, muchos países están revisando el papel de los sindicatos, por lo que se necesita una mayor flexibilización contractual. Recordemos, porque muchas veces se olvida, que cuando una persona consigue un trabajo, esta firmando un contrato en el cual ofrece su habilidad a cambio de una retribución, ya sea monetaria o en especie.
            En la actualidad hay anuncios de la promulgación de una nueva Ley del Trabajo (la más importante después de la Constitución). El Vicepresidente de la República ha anunciado que esa nueva ley contempla dos disposiciones que queremos comentar brevemente porque a nuestro parecer van en contra de lo que se ha señalado en los párrafos anteriores. Estas se refieren a la retroactividad de las prestaciones y a la reducción de la Jornada.
            La retroactividad de las prestaciones en nada mejora el poder adquisitivo de los trabajadores y por ende en nada beneficia el consumo actual, ya que estamos hablando de los ingresos futuros. Lo que si trae en consecuencia, es un aumento de los costos para las pequeñas y medianas empresas. En referencia a la reducción de la jornada esta al no ser la consecuencia de una mejora en la productividad lo que hace es aumentar el costo de producción. Es decir ambas medidas no son convenientes para la modernización de un país
            Lo único que  podemos decir para cerrar este punto, es que dada importancia del tema, repetimos, solo superada por la promulgación de una nueva constitución, por favor saquen el tema del debate político y discútanlo con todos los venezolanos. Entre todos podemos lograr una mejora significativa en la legislación laboral venezolana.


domingo, 15 de abril de 2012

DOS COMENTARIOS

Al comienzo de la segunda década del siglo XXI, existe un acuerdo general de que las relaciones entre los factores productivos ha cambiado y que se ha entrado a lo que el economista Fritz Machlup denominó en el año 1962: “La sociedad de la información” y que actualmente algunos llaman la “economía del conocimiento” o nueva economía.

En esta nueva era, el principal factor productivo es el conocimiento humano, con toda la carga de creatividad individual que esto requiere. Para medir la potencialidad de un país en este nueva era (creando tecnologías de información y conocimiento, -TIC-), el cuerpo técnico de las UNCTAD/Naciones Unidas, ha creado el ICT Diffusion Index and Ranking, el cual se define a partir de dos dimensiones: Conectividad: medido por el número de Internet hosts per cápita; número de PC per cápita; número de líneas telefónicas per cápita; y número de líneas de telefonía móvil per cápita. De esta manera a una medida del desarrollo de infraestructura. Acceso: Se mide por el número estimado de usuarios de Internet, tasa de alfabetización, costo de la llamada local y el PIB per cápita (PPPUS$). Componente este que permite describir la oportunidad de sacar ventaja del hecho de estar conectado.

En el año 2005, este ranking señalaba a Luxemburgo como el país, con el puesto No.1 y Nigeria en el puesto 180. Venezuela ocupaba el puesto No. 87. Noticias recientes y hay que señalarlo, extraoficiales, señalan que una nueva edición de este indicador ubican a nuestro país en el puesto 107. Si esto es verdad, indican un claro retroceso de Venezuela en el nuevo mundo de la alta tecnología, restándonos competitividad comercial internacional.

Otro comentario que queremos realiza es referente al fenómeno inflacionario que estamos viviendo. Si no se entiende que este es un PROCESO y no un hecho puntual, no se logrará vencer. Existe un componente en particular de este proceso que algunos llaman: “Inflación contenida” o “Inflación potencial”, que se refiere al posible incremento en los precios retenido o en estado latente por el control de precios.

Muchos economistas señalan que si mañana se eliminara la regulación, el aumento que sucedería estaría más cercano a la inflación real. Eso es excesivo, pero el concepto, en si es importante. Con la existencia de un control de precios, el cual es un hecho puntual, los precios se congelan en un momento dado sin una revisión periódica, se deja solapada o escondida parte del desequilibrio económico que genera el proceso inflacionario, con la consecuencia de que siempre existirá la particularidad que la variación de los pecios oficiales siempre será menor a la real. Mientras más dure el control, mayor será el desequilibrio escondido, por esta razón es que nadie en su sano juicio puede recomendar una completa liberación de precios. Hay que hacerlo en forma gradual.

domingo, 4 de marzo de 2012

EL ESTADO

Toda doctrina económica, tiene implícitamente una visión muy específica de cómo debe estar organizado el Estado y del alcance que debe tener sobre la economía. Desde un extremo liberal que apoya al mercado como mecanismo de producción y distribución, en que el Estado debe ser lo más reducido posible hasta el otro extremo socialista en que el Estado es el todo poderoso de tomar las decisiones.

Pero ¿Qué es el Estado? ¿Quiénes lo conforman? ¿Cuáles son sus funciones? Estas preguntas deben tener una respuesta clara antes de discutir cualquier forma de producción de bienes y servicios. Son muchas las personas que confunden gobierno con Estado, como fue el caso del Luis XIV, Rey de Francia, a quien se le atribuye aquella expresión, himno al absolutismo: “El Estado soy yo”.

Como lo explican, Francisco J. Virtuoso (Rector UCAB) y Hildebrad Breuer (Lic. En Estudios Internacionales) en su trabajo denominado: “Estado, gobierno y sociedad, que es parte del libro. “Buenos Gobiernos Locales, caminos para promover una gestión pública corresponsable” (Centro Gumilla, Dic. 2011). El Estado como sistema de organización política tiene aproximadamente 400 años de historia y se concibe como capaz de “garantizar el orden y la seguridad necesarios para el goce efectivo de los derechos de las personas. Es visto así, el único camino disponible para escapar del estado de la naturaleza”.

El Estado surge de la voluntad o decisión de una parte de la ciudadanía, de “… un número reducido de hombres a quienes se confía el poder legal de formular sus mandatos”. En referencia a su organización y funciones, estas se conciben como un conjunto de instituciones, leyes y reglas de juego, que tienen como principal característica la transcendencia en el tiempo sobre el hombre. El Estado venezolano está conformado por 5 poderes: El Ejecutivo, El Legislativo, El Judicial, El Electoral y El Poder Ciudadano (art. 136 de la Constitución).

Es una organización evolutiva, que continuamente tiene que adaptarse a las nuevas visiones, legislaciones, creencia, nuevas formas de propiedad, etc. “En los Estados de hoy en día, el consentimiento, se dice, es la base, por lo que el tema de la autonomía de los ciudadanos, y de la ciudadanía misma como cualidad (…) No es fruto del poder del más fuerte; es consecuencia del acuerdo de las voluntades de los asociados, de ahí que sea elevado a ente de razón, y únicamente en éste el hombre realiza plenamente su naturaleza de ente racional”.

El artículo 3 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela señala lo siguiente: “El Estado tiene como fines esenciales de defensa y el desarrollo de la persona y el respeto a su dignidad, el ejercicio democrático de la voluntad popular, la construcción de una sociedad justa y amante de la paz, la promoción de la prosperidad y bienestar del pueblo y la garantía del cumplimiento de los principios, derechos y deberes consagrados en esta Constitución.”

Por lo antes expuesto y a diferencia de Luis XIV, nos atrevemos a decir “El Estado somos todos”.

domingo, 26 de febrero de 2012

EMPLEO, UNA DE LAS CLAVES PARA EL DESARROLLO

Los últimos estudios realizados por el “Proyecto Pobreza” de la Universidad Católica Andrés Bello han determinado que la calidad de empleo, vivienda y hábitat, educación para la inserción social productiva y salud para una vida larga y que valga la pena vivir, son los cuatro ámbitos sobre las cuales se deben diseñar las políticas públicas para lograr el desarrollo económico de Venezuela.

El instituto de Investigaciones Económicas y Sociales de la UCAB, dirigido por Luis Pedro España, ha publicado recientemente el libro: “La precariedad del empleo en Venezuela, una clave para la superación de la pobreza”, escrito por Genny Zúñìga y que representa el volumen 1 de la colección: “Cuatro Claves para el Desarrollo de Venezuela”.

¿Por qué el empleo es fundamental para el desarrollo económico y social del país? La respuesta aunque evidente no es tan sencilla. Los sueldos y salarios son la principal fuente de ingreso familiar. “La cumbre Mundial sobre Desarrollo Social realizada en la ciudad de Copenhague en 1995, destaca entre los compromisos adquiridos la promoción del pleno empleo como una prioridad fundamental de las políticas económicas y sociales. Además pone énfasis en la necesidad de acelerar el desarrollo económico, social y humano de los países menos favorecidos. Para dar cumplimiento a estos compromisos se propuso un programa de acción que tiene tres ejes centrales: el primero la erradicación de la pobreza; el segundo, la creación de empleo productivo junto a la reducción del desempleo y, el tercero, la integración social. Cinco años más tarde, en el período de sesiones extraordinarias de la Asamblea General de las Naciones Unidas celebrada en Ginebra, se reconoce que los progresos alcanzados respecto al empleo y el desempleo han sido lentos, pese al papel fundamental que el trabajo productivo tiene en el desarrollo económico, en la erradicación de la pobreza y en el logro de la integración social.”

El empleo y la desocupación son las dos caras de la misma moneda, siendo esta última consecuencia de un mercado laboral que es incapaz de generar los suficientes empleos que cubran la oferta de de mano de obra y su consecuencia más visible y directa es la falta de ingresos, que permitan escapar de la pobreza, la cual se entiende, por la situación en que el ingreso obtenido por el trabajador se encuentra por debajo del monto per cápita de la Canasta de Bienes y Servicios determinada por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Por lo tanto, una política de empleo debe procurar generar empleos de calidad.

Como es demostrado en este estudio, el principal problema del mercado laboral venezolano que se identifica como un impedimento para la superación de la pobreza y que además contribuye a generar lo que se conoce como el núcleo de pobres, es la existencia de empleos de mala calidad o empleos precarios. Esta situación se agrava por el proceso de globalización que se ha vivido en los últimos años y que ha traído como consecuencia, la incorporación y el desarrollo de nuevas tecnologías que obligan la creación de nuevos puestos de trabajo que requieren habilidades y conocimientos especializados.

En este estudio también se encuentra, mediante una modelo (LOGIT), que existe una relación muy fuerte entre la precariedad laboral y los niveles educativos y la inversión en la industria manufacturera. Por lo tanto, una de las conclusiones principales de este trabajo es que el país requiere hoy de trabajos de calidad y de un recurso humano capacitado. Para ello las políticas del mercado laboral deben contemplar a capacitación para contar en corto plazo con una mano de obra más calificada, así como, la generación de empleos productivos, en la cual se incorporen a los empresarios y asegurar un entorno jurídico y político favorable para garantizar el crecimiento de los sectores económicos más productivos. Igualmente es necesario dejar de lado la actual economía de puertos y en contrapartida, promover la inversión para la producción y así estimular el crecimiento de las exportaciones.

lunes, 13 de febrero de 2012

VIVA VENEZUELA

En este momento estamos esperando los resultados de las elecciones primarias, realizadas durante el día de hoy 12F. Con el gusto en la boca de una participación ciudadana, valiente, decidida, alegre y sobre todo pacífica que estuvo por encima de las expectativas de sus dirigentes, dando la voz de que Venezuela ya no es la misma.

Superando todos los pronósticos (incluyendo los míos), los venezolanos desbordaron los centros de votación (recordemos que fue la elección interna de la MUD), más de 3.000.000 de ciudadanos ejercieron su derecho a elegir a sus autoridades.

Cuáles son las lecciones que nos dieron, veamos: en primer lugar se está reivindicando la participación política del venezolano. Hemos comprendido que ante los problemas que tiene nuestro país, no se puede voltear la cara y dejar pasar, depende de nosotros el destino del país, no podemos echarle la culpa al otro si nuestros dirigentes no hacen un buen trabajo. Es nuestra responsabilidad porque nosotros los elegimos. Lo mismo sucede con la carrera de “político”, cada día crece el número de jóvenes que manifiestan abiertamente su deseo de dedicarse a la carrera política.

En tercer lugar, el alto número de votantes para una elección interna, es un grito al gobierno de que algo no está haciendo bien. Es imposible que todos sean oligarcas, y si votaron algunos afectos al partido de gobierno, es más grave aún.

En cuarto lugar, a los venezolanos no le gustan los extremos, los precandidatos más radicales obtuvieron una muy reducida votación. Están agotados del continuo enfrentamiento

Pero la lección más importante es que el pueblo venezolano es demócrata, y si le dan la oportunidad, expresan con mucho gozo su voluntad.

Nuestro gran deseo es que los candidatos presidenciales (Henrique Capríles R. y el presidente Hugo Chávez) que se enfrentan el próximo 7 de octubre hagan una buena lectura de lo que pasó hoy y dejemos ese enfrentamiento que no puede dejar nada bueno.

Ante la experiencia de hoy, lo único que me queda decir es ¡VIVA VENEZUELA, MI PATRIA QUERIDA!.

miércoles, 8 de febrero de 2012

“Stress” Inflacionario

Por Martín Simonetta

Director Ejecutivo de la Fundación Atlas1853.

Roberto es empleado en una empresa mediana en el Gran Buenos Aires. Si bien su trabajo se encuadra en la formalidad legal, mes a mes observa cómo su salario va perdiendo poder de compra. Su esposa, María trabaja informalmente en un comercio. La pareja aprendió a convivir con el aumento generalizado de los precios y la forma en que este proceso corroe su podes de compra.


Ambos han ido modificando sus hábitos: dejaron de ir a comer una vez por mes al restaurant del barrio para hacerlo siempre en su casa, fueron cambiando o resignando las marcas de los productos que consumían, modificaron los hábitos alimenticios de la familia pasando a consumir productos más accesibles. Enfocaron sus energías en garantizar una adecuada nutrición para sus tres hijos. Fueron observando cómo –a pesar de que sus salarios aumentaban leventemente- lo hacían a un ritmo más lento que los precios de su canasta familiar.


Este proceso de resignación lenta les genera una frustración que afecta su estado de ánimo y sofoca su sentido del humor, poniendo bajo presión la calidad de la relación de pareja que, día a día, mes a mes, debe poner a prueba su creatividad para poder vivir con los salarios de ambos.


La situación los agobia. Cada día deben caminar más rápidamente para permanecer en el mismo lugar. La carrera contra la inflación les produce una gran frustración.

¿”Stress” o “distress”?

El “stress” -traducible como tensión- es un útil mecanismo bioquímico que activa procesos de defensa del organismo, alertándolo en situaciones de peligro. En diferentes especies, incluso en la humana, resulta fundamental para generar reactivamente en momentos clave que ponen en juego la supervivencia, tales como el ataque de otros predadores. Una de las características es la producción de cortisol, la hormona que nos ayuda a estar alerta en situaciones de peligro.


La sabiduría evolutiva ha hecho que estos mecanismos se activen y nos protejan, pero –una vez superada la situación de riesgo- se desactiven, permitiendo el retorno al funcionamiento habitual del organismo.


¿Qué sucede si la activación transitoria de este sabio mecanismo de defensa se hace permanente? Allí estaremos frente a un fenómeno diferente: el “distress”. Mientras que el “stress” es un mecanismo adaptativo que nos permite reaccionar excepcionalmente en momentos críticos, el “distress” se diferencia –entre otras características- porque se produce de forma permanente y con gran intensidad como reacción a duraderos contextos hostiles. Modificaciones del humor, ansiedad, irritabilidad, conflictividad en las relaciones inter-personales, cansancio permanente, son algunos de los síntomas de esta situación, con los consecuentes potenciales efectos sobre la salud física.

Inflación, frustración

¿Cuál es el vínculo entre inflación y “distress”? Es muy posible que usted ya sepa la respuesta. A medida que los precios aumentan a un ritmo superior que los ingresos, va haciendo necesario adaptarse al menor poder de compra de nuestro dinero, lo cual genera en nuestros organismos las características descriptas.


El “stress” inflacionario se desata debido a que el aumento generalizado de los precios obliga a las personas y a las organizaciones a enfocar sus esfuerzos en re-adaptarse de forma permanente para continuar en el mismo lugar, a concentrar sus energías en sobrevivir y no en crecer.


La ausencia de estabilidad monetaria y la pérdida de valor de la moneda tienen un claro efecto en el re-acomodamiento de los ingresos-egresos de las personas, las familias y las empresas. Agregan, a las naturales dificultades de la supervivencia y crecimiento, un factor externo que obliga a asignar una porción de energía a correr esta maratón donde compiten los salarios y la rentabilidad empresaria contra pérdida de valor de la moneda.


En las causas de la inflación, los argentinos somos expertos. Diversos estudios señalan el mayor de sus orígenes: el fenomenal incremento del peso del gasto consolidado del sector público, que pasó de 28% en el 2003 al 45% en el 2011. Este mayor gasto por parte del sector público es el que asfixia a los ciudadanos, y la inflación –consecuencia de la emisión monetaria- es uno de sus aspectos que parece dañar de forma silenciosa y continua a la sociedad.


Por más que se quiera eludir esta verdad, el proceso inflacionario ubica a la Argentina como una de las líderes (si cabe la expresión) a nivel mundial en esta materia. La brecha de casi 13% existente entre la inflación verdadera (22,8%) -medida por consultores privados y publicada por diputados opositores- y la del Instituto Nacional de Estadística y Censo (inferior al 10%) nos da una idea del tamaño de la negación.


Un profundo cambio en la política fiscal y monetaria a efectos de preservar los silenciosos efectos de la inflación –uno de los impuestos más distorsivos- sobre la salud mental y física de los argentinos.

lunes, 23 de enero de 2012

EL BONO DEMOGRAFICO


En días recientes, caminando por el pasillo de Ingeniería de la UCV, uno de los últimos sitios en Caracas, donde se puede conseguir libros técnicos (y otros, de acuerdo al gusto de cada quien) a buen precio, me encontré un verdadero tesoro en un pequeño folleto editado por la Asociación Civil para la Promoción de Estudios Sociales de la UCAB. Titulado “El reto demográfico en Venezuela” cuyo autora es Anitza Freitez L.

En este interesante estudio, quiero destacar el concepto de “bono demográfico”, con el cual se designa el posible beneficio que puede obtener una sociedad motivado al cambio de la composición por edades de su población.

Desde que tengo uso de razón, siempre he escuchado la versión de que Venezuela es un país compuesto en su mayoría por jóvenes menores de 18 años (censo de 1961), lo que gráficamente se representaría como una pirámide de ancha base, y que se va estrechando a medida que aumenta la edad de la población.

La situación, para la fecha actual puede ser diferente, hay que esperar los resultados del Censo 2011, para comprobarlo. Lo que si es muy claro que los factores que influyen sobre esta pirámide si han cambiado.

La reducción de la mortalidad infantil, la mayor educación de la población femenina que ha permitido un descenso del número de hijos por cada madre, el aumento en la esperanza de vida de la población, el traslado del campesino a las ciudades, etc. Son factores que si lugar a duda pueden hacer más pareja la pirámide poblacional El cambio de esta última, “con una mayor proporción de adultos mayores es probable es muy probable que se aféctela capacidad de ahorro de la economía porque típicamente los adultos mayores tiende a desacumular activos –desahorrar- mientras que las personas más jóvenes, si están participando en la fuerza de trabajo, son los que tienden a ahorrar para afrontar su posterior vejez” .

Esta situación en la cual la pirámide se ve reforzada en las edades productivas puede ser un momento de oportunidad para crear una economía sólida, para lo cual, se deben implementar una serie de políticas pública que permitan potenciar el beneficio de este bono demográfico.

La autora señala cuales pueden ser este conjunto de políticas, las cuales compartimos plenamente. Si aprovechamos o no esta oportunidad es enteramente nuestra responsabilidad y no podemos echarle la culpa a un tercero.

Finalizamos esta breve reseña, resaltando el párrafo final de la contraportada: “Así de drástico, exigente y determinante es el reto demográfico que tendremos que afrontar en las próximas 2 ó 3 décadas”

lunes, 16 de enero de 2012

EL GRAN RETO DE LA ECONOMIA VENEZOLANA

Son dos años de tu sonrisa y de tu amor

Nunca sabrás lo que hiciste por mí, hijo mío

Aunque, nunca te dejaré de decir, cuanto te amo.

¡Feliz Cumpleaños!

Después de haber tomado un descanso navideño, regresamos a un año 2012 bastante complicado desde el punto de vista económico, debido al aumento del gasto público típico de los años electorales. Es como echarle gasolina al fuego, en este caso al aumento de los precios.

Una vez más, el principal problema que tenemos es el de un proceso inflacionario, por encima de los 2 dígitos, es decir la más dura de erradicar en el breve plazo. Adicionalmente, la inflación venezolana contiene todos los ingredientes para que se mantenga durante el 2012, la variación registrada para el 2011.

En primer lugar, analicemos el componente referido a las expectativas. Como una profecía autocumplida, cuando todos creen que este año la inflación va a estar por encima del 25%, tengan la seguridad de que va a estar por encima del 25%. Cuando el gobierno anuncia que para el cálculo del presupuesto público se incluye una variación de precios de tal magnitud. Todo el mundo tratará de ajustar sus costos o gastos en general por ese nivel de inflación. Por lo tanto tendremos un piso para el año 2012 de 25%.

Como muchos lo han indicado, los años electorales se caracterizan por ser períodos de elevada variación de los precios. Este fenómeno es explicado por la gran cantidad de dinero que sale a la calle como pago de los gastos de la propaganda electora. Si el dinero en circulación es la contrapartida de la producción de bienes y servicios, por lo que deben guardar una proporción adecuada para permitir la estabilidad de la actividad comercial. Si hay menos dinero que bienes y servicios, y esta se prolonga en el tiempo se produce una reducción del aparato productivo del país. En caso contrario, si el dinero es mayor que la cantidad de bienes y servicios hay una presión para que los precios aumenten. En el 2011 la producción aumentó en 4,2%, la cantidad de dinero creció en 51%.

El último componente es la insuficiencia de la oferta para cubrir la demanda de bienes y servicios. La escasez de productos en los estantes, genera una presión al aumento de los precios. Históricamente este fenómeno se ha combatido con la importación de bienes y servicios. Hay indicios de que esta vía se está agotando.

Por lo antes expuesto, el 2012 debe registrar una variación de los precios similar a la experimentada en el 2011. El gran reto de la economía venezolana: erradicar el proceso inflacionario, será pospuesto otra vez.

Como mensaje final quiero tomar prestadas unas palabras de nuestro profesor, Domingo Felipe Maza Zavala: “No se puede negar que el Gobierno ha hecho o intentado hacer una gestión para lograr los objetivos mencionados (…) de desarrollo y bienestar, pero ha sido una gestión contradictoria, dispersa, discontinua, enfrentada en buena medida a la voluntad y la opinión de amplios grupos de la población, lo que le ha restado consistencia y puntos de apoyo. La colectividad desea y requiere cambios en la estructura económica, en la organización del Estado y en las relaciones entre este y aquella. Estos cambios tienen que hacerse por consenso, aunque siempre habrá opositores retrógrados, aferrados a intereses anacrónicos y no la minoría.

Los días 22, 23 de enero estará en Caracas y el 25 en Valencia el Dr. Gabriél Salazár, medico venezolano, jefe médico de la Clínica de Especialidades Médicas y Quirúrgicas Barcelona Parkinson. Para mayor información es pueden comunicar a través de info@barcelonaparkinson.como por el telf.. 00-34-93-877397.

lunes, 12 de diciembre de 2011

FELIZ NAVIDAD Y UN PROSPERO AÑO 2012


La tradicional expresión que encabeza este escrito, no es la simple expresión protocolar. Para mi, es un verdadero sentimiento.

A pesar de los niveles de angustia que muchos venezolanos viven en estos momentos. Deseo que mis lectores y amigos recuerden el motivo por el cual se celebra la navidad, la natividad, el nacimiento de una esperanza llamada JESUS. Para los creyentes de otras religiones, les comento lo siguiente: en la sala de ni casa tengo una figura, regalo de mi madre, que representa a la sagrada familia (María, José y el niño Jesús), que me recuerda, día a día, que más importante que los logros personales, más vital que el dinero, es la familia. Por ese motivo siempre ha sido mi ilusión y realidad, la cena de navidad en familia.

Aunque sea muy modesta, o muy abundante, según las posibilidades de cada quién, les deseo una feliz NAVIDAD, en familia, todos unidos por el amor, sin rencores. Recuerden que para recibir, primero hay que dar. Tengan la seguridad que si dan una sonrisa, recibirán mucha alegría. Si dan u abrazo, recibirán el apoyo que necesitan.

El año 2012, se ve bastante complicado. Elecciones presidenciales, problemas climáticos, inflación etc., no es imposible de superar. Si todos juntos, unidos, si nos los proponemos, el año que viene será un año de prosperidad.

Recuerde fijar sus metas para el año que viene, pequeñas, factibles, reales y medibles, como pueden ser: la inscripción al curso que tanto se desea, dar la inicial para la vivienda necesitada. Leer el libro por tanto tiempo pospuesto y, cuando lo logremos, fijarnos otra meta. La frustración viene cuando nos fijamos una meta por encima de nuestras posibilidades o que son irrealizables. Recuerden que el camino se comienza con el primer paso.

De lo anterior, se puede desprender que mi deseo si es posible. Solamente, me queda para concluir estas cortas palabras. Mis estimados lectores, amigos, pacientes con el mal de Parkinson y otras enfermedades, desde el fondo de mi corazón les deseo UNA FELIZ NAVIDAD Y UN PROSPERO AÑO 2012. Nos veremos de nuevo el año que viene, voy a tomar un pequeño descanso, para recobrar mis fuerzas y volver con mucho ímpetu para seguir luchando lo que más quiero después de mi familia, mi país, Venezuela.

domingo, 4 de diciembre de 2011

LA REVOLUCION DE LA RIQUEZA

A finales del siglo XX surge una verdadera revolución mundial, la que Alvin Toffler ha denominado la “Revolución de la riqueza”. Ya el recurso productivo predominante no es el capital, ni el trabajo, ni siquiera es la tierra, lo que genera riqueza, es el conocimiento.

En la sociedad postindustrial, en la sociedad que vendrá después del capitalismo, el conocimiento se convierte en el factor dominante de la competitividad de los pueblos en los mercados internacionales. Y por consiguiente, en la causa principal de su prosperidad económica.

El Dr. Rafael Ramírez Camilo, nos señala que se ha extendido el uso del término de “sociedad del conocimiento”, con el que se destaca el protagonismo que ha logrado, en tal contexto, el conocimiento científico que posee el profesional universitario.

En las siguientes líneas veremos una pequeña cronología del desarrollo teórico de los estudios del conocimiento como el factor productivo generador de riqueza.

En el año 1962, el economista Fritz Machlup, publica: “La producción y distribución del conocimiento en los Estados Unidos”, donde aparece por primera ves la palabra “sociedad del conocimiento”.

En 1969, con la publicación de “La Galaxia Gutemberg” y su posterior obra, en la que se debe destacar “La aldea Glotal” (1989), el teórico de la comunicación, Marshal Mcluhan, académico e investigador de la Universidad de Toronto, pasó a la posteridad como uno de los grandes visionarios del presente y futuro de la sociedad de la información.

Para muchos, el que marcó la diferencia entre al antes y después, del estudio del impacto que tiene el conocimiento en las organizaciones, es Peter Drucker. Este prolífico escritor, registró sus reflexiones en varios libros, entre los cuales podemos destacar: “La era de la discontinuidad (1968), La Saciedad postcapitalista (1999).

Uno de los autores que no se debe dejar de estudiar por los interesados en el estudio del conocimiento, es el ya mencionado: Alvin Toffler. Sus obras: ”El Shock del Futuro” (1989); “El Cambio del Poder” (1990) y “La revolución de la Riqueza” (2006) escrita con Heidi Toffler.

Otros textos de referencia son: La Sociedad Postindustrial (1969) del Francés Alain Touraine; “El advenimiento de la sociedad postindustrial” (1973) de Daniel Bell;

En épocas recientes hay que destacar la obra de Manuel Castells con sus estudios “La era de la Información, Vol. I. La Sociedad Red” (1999): “La era de la Información, Vol. II . El poder de la identidad” (2001) y “La era de la Información, Vol. III. Fin de Milenio” (2001). También debemos destacar “la Galaxia Internet” (2006). Por último se debe señalar el libro “Mundo Digital” (2005) de Nicholas Negroponte.

“En la actualidad, la importancia del conocimiento en la creación de riqueza crece a un ritmo constante y esta a punto de alcanzar y está a punto de alcanzar un punto más alto y traspasar ulteriores fronteras, a medida que cada vez más lugares del mundo se conecte a un banco de inteligencia planetario que no cesa de crecer, cambiar y ser más accesible. En consecuencia todos nosotros, ricos o pobres, viviremos y trabajaremos con la riqueza revolucionaria o sus consecuencias” (Toffler, 2006)