lunes, 25 de abril de 2011

LA NUEVA TEORIA DEL CRECIMIENTO (I)

Por muchos años, el estudio de la teoría del crecimiento económico se basaba en la existencia de tres factores de producción: Tierra, nombre genérico en que se agrupa todos los recursos naturales; capital, que corresponde a todos los bienes que permiten ampliar la capacidad productiva o la elaboración de otros bienes (material, maquinaria y equipo) y el factor trabajo o mano de obra.

Para la simplificar el análisis, se supone que a corto plazo (menos de un año) el factor tierra es constante y por lo tanto, toda tecnología se basa en una combinación del capital y mano de obra. Por ejemplo, la elaboración de una camisa requiere una costurera cociendo en una máquina por una hora.

El análisis realizado bajo este supuesto se encontró con una gran dificultad: a medida que se incrementaba el uso de uno de los factores (la mano de obra p.e) la producción, aunque inicialmente crece luego disminuye, siendo lo más grave, que crece el costo promedio de producción, lo que hace que el productor necesite un precio de venta más alto para mantener el margen de ganancia.

Veamos como es este proceso con el ejemplo de María, la costurera. Gracias al pequeño ahorro que pudo realizar el último año. Pudo comprar una máquina de coser usada y gracias a su comadre pudo conseguir un trabajo cociendo cuellos de camisas para hombres. María resultó una costurera muy hábil y cada día le daban más cuellos. Su hija, en los ratos libres, le ayudaba a clasificar el material que recibía. Por lo tanto entre las dos podían terminar una gran cantidad de de cuellos de camisas en el día. María observó que perdía mucho tiempo buscando el material y llevando el producto terminado. Para evitar esto, habló con un hermano que tenía una moto. Por un monto razonable, él aceptó, aunque el costo de elaboración aumentó, el tiempo que le quedó libre, le permitía cocer más cuellos, pagarle al hermano y tener algo para ella y su hija. Todo marchaba muy bien y pensó que podía hablar con una amiga para que la ayudara. Ahora eran cuatro personas las que trabajaban en su casa, pero observó que la cantidad de cuellos terminados disminuía y no encontraba la razón.

María no se daba cuenta de que la amiga no era tan hábil como ella y cocía menos cuellos, o que era muy conversadora y perdían mucho tiempo entre risas y risas o que simplemente hacía falta comprar otra máquina de coser. En economía lo que le pasa a María se conoce como rendimiento decrecientes a escala, la cual sucede cuando el aumento de un factor productivo trae una disminución de la producción y un aumento del costo promedio. En las empresas esto se puede ver por que al aumento de la demanda es superior a su capacidad de comprar nuevas máquinas, es decir invertir, o cando el tamaño del mercado no le permite crecer. La solución tradicional que se recomendaba era la internacionalización de la empresa para ampliar sus mercados.

¿Pero esto siempre sucede? ¿todo aumento de un factor productivo conduce a un rendimiento decreciente? ¿existe algún factor productivo que produzca rendimientos crecientes a escala? En el año 1990, el profesor Paul Romer (de la Universidad de Stanford, del Centro para el Desarrollo Internacional y el Instituto Stanford de Investigación de Política Económica, y un miembro no-residente en el Centro para el Desarrollo Global) publicó un artículo (fue presentada en 1983 para obtener el doctorado en la Universidad de Chicago) en la revista especializada: “Journal 0f Political Economic” y que lleva el título de: “Endougenous Techonological Change” o “Cambio Tecnológico Endógeno”, en castellano. (Trimestre Económico” No 231, México 1991), el cual le da un nuevo giro al estudio del crecimiento económico.

¿Por qué ese artículo es tan importante? El periodista especializado en temas económicos: David Warsh, al respecto nos señala: “… El primer párrafo contenía una frase que al principio era más desconcertante que otra cosa: El rasgo distintivo de (…) la tecnología como factor de producción es que no es un bien convencional ni un bien público; es un bien no rival, parcialmente excluible.

Y ahí empezó todo. Pues fue concretamente esa frase, que se escribió hace más de quince años y que aún no se entiende mucho, lo que puso en marcha una trascendental transformación conceptual de la ciencia económica al ampliar la conocida distinción entre bienes públicos, suministrados por el Estado y bienes privados, con una segunda distinción entre bienes rivales y no rivales…” (El Conocimiento y la riqueza de las naciones. Antony Bosch Editor. p. 18).

lunes, 11 de abril de 2011

¿POR QUÉ VENEZUELA NO CRECE?

El Dr. Asdrúbal Baptista siempre ha marcado pauta en el estudio del pensamiento económico venezolano. Durante muchos años sus estudios han girado sobre la renta petrolera y sus consecuencias sobre el desarrollo económico. En los últimos años, a menudo le hemos escuchado preguntar: ¿por qué Venezuela no crece?

La revista Latinoamericana de política, economía y sociedad “PERSPECTIVA”, publicó recientemente bajo el sugestivo título de “La sencilla complejidad de la realidad Venezolana” (No 25. 2011) un análisis muy completo de nuestro país. Uno de los artículos fue encargado al Dr. Baptista, el cual bajo el título de: “Venezuela y sus circunstancias”, y con la elegancia con que siempre se caracteriza, y utilizando el análisis gráfico, sencillo pero de un alto poder visual, aclara el misterio y responde porque Venezuela no crece.

En primer lugar logra visualizar tres segmentos en el comportamiento promedio del PIB real por habitante. Un período de estabilidad, que va desde el año 1882 hasta 1920, momento crucial y punto de inflexión, en el cual se comienza la explotación de un recurso natural no renovable como es el petróleo. De crecimiento acelerado entre 1921 y 1980 y una tendencia descendente que todavía no parece finalizar.

¿Qué pasó al principio de la década de los 80’s? para que Venezuela perdiera la senda del crecimiento para no encontrarla más. El Dr. Asdrúbal Baptista responde de la siguiente manera: “ … El funcionamiento normal de una economía moderna descansa en un equilibrio primordial, establecido en sus orígenes históricos entre el poder político y la sociedad civil.” (p.57)

Esta tesis la respalda el Dr. Baptista en dos gráficos en los cuales se observa la “…distribución entre agentes sociales de la propiedad sobre los medios de producción, como indicador de quien asume en la práctica el poder económico…” El primero referido a Estados Unidos, muestra dos línea paralela, casi horizontales, mostrando una gran estabilidad de las variables. La que representa al sector privado siempre es superior a la del público, manteniendo aproximadamente una relación 85% . 15%. “…El poder económico en la sociedad norteamericana, que puede tomarse como del todo representativa de lo que es el mundo moderno, descansa fundamentalmente en el ejercicio de de la propiedad privada sobre los medios de producción.”

En el siguiente gráfico referido a Venezuela, podemos observar como la propiedad pública de los medios de producción comienza a crecer aceleradamente a principio de los 80’s hasta superar a la propiedad privada a principios del presente siglo.

Entonces, Venezuela no crece económicamente por la existencia de una situación en la cual nos encontramos con “… un Estado económicamente autónomo sobre la base de un ingreso propio de relaciones de poder de muy antigua cuño, con una sociedad civil muy desarrollada pero en condiciones de subordinación material que le impiden desenvolverse con la libertad que precisa.”

¿Cuánto tiempo requerirá revertir esta situación? Todo el que se necesita, pero lo importante es dar el primer paso.

lunes, 4 de abril de 2011

ECONOMINSILIO



Podemos definir en una sola palabra la actividad humana en el presente siglo: CAMBIO. Por lo cual todas las ciencias sociales deben tratar de orientar y explicar este caos que genera el ritmo avasallante con que se dan .

La ciencia económica no se escapa de esta realidad. En los últimos años la relación entre los factores de producción se ha alterado, cobrando relevancia, la mano de obra y el conocimiento especializado en alta tecnología. Este fenómeno ya se conoce en el mundo académico como la “economía del conocimiento”. Los profesores Jordi Vilaseca y Joan torres de la Universidad de Cataluña, que han estudiado el tema nos indican: “… en la nueva economía global del conocimiento, las capacidades de aprendizaje y de innovación de los agentes económicos y la flexibilidad organizativa e institucional constituyen la fuente principal de los aumentos de productividad, competitividad y bienestar.” (Principios de Economía del Conocimiento, Pirámide, 2005)

Del concepto quiero destacar, en este momento, lo de la flexibilidad organizativa. Las empresas ya no tienen que concentrarse en un espacio físico. La tecnología moderna permite que los trabajadores puedan trabajar en sus casas y mandar el fruto del mismo a través de la red. Cada día aumenta el número de trabajadores por cuenta propia o que han formado una pequeña empresa que funciona en su hogar.

En estos días leí en una de estas revistas dominicales, una expresión muy novedosa. “Economía del insilio”, (Rafael Osio Capriles, 2011) que yo resumidamente me atrevo a denominar “econominsilio”.

La palabra Insilio “…fue acuñado por Mauricio Rosencof, poeta, traductor y dramaturgo uruguayo, referido al exilio interior de muchos de sus compatriotas en tiempos difíciles”. (Alfonso Chase, 1995)

Los autores indican por el concepto de “economía del insilio”, al aumento de la demanda de bienes de consumo por la cantidad de personas que se quedan en sus casas en una especie de exilio voluntario, motivado por el alto costo de la vida y la inseguridad personal. Este fenómeno se ve reflejado en un aumento de la demanda de televisores LCD, películas piratas y los reproductores de DVD para verlas, utensilios y cursos de cocina para invitar a los amigos a comer en casa, etc.

Pero, como ven este concepto se queda corto porque solo se dedica a la demanda (también ha aumentado la compra de computadores personales, teléfonos celulares inteligentes, que facilitan el trabajo) cuando vemos como también afecta a la oferta y la nueva relación entre los factores de producción. Por lo tanto me atrevo a definir como “Econominsilio”, como la dinámica económica que se genera por la decisión de las personas de realizar su actividad laboral y recreativa en sus hogares. Como dicen que nunca hay nada nuevo bajo el sol, se me ha despertado la curiosidad por el tema. Si alguien conoce algo, podemos iniciar el debate y la discusión.

Me disculpan si termino en el día de hoy con otro tema, pero el próximo lunes 11 de abril se celebra el día mundial de la lucha contra el mal de Parkinson y quiero destacar la importancia que está cobrando esta enfermedad en la población venezolana, sobre todo el Parkison juvenil, como la que yo padezco (tengo 49 años de edad), y que gracias a Dios tiene tratamiento que permite recuperar en un grado bastante aceptable la capacidad motriz, todavía no se conoce la cura. Una vez más invito a las empresas y autoridades médicas a combatir los grandes problemas que tiene esta enfermedad: el temor causado por la ignorancia y falta de información sobre el tema, y el alto costo del tratamiento. Por los momentos los invito a consultar mi modesta contribución, basada en mi experiencia, en http://parkinsonvenezuela.blogspot.com y para un contacto más especializado: http://www.barcelonaparkinson.com