Hasta el momento hemos visto que el Producto Interno Bruto (PIB) puede ser calculado mediante dos metodologías diferentes: mediante la suma de la producción de cada una de los sectores económicos (petrolero + telecomunicaciones + agricultura+…) y mediante la estimación de la forma en que se utilizó esa producción (PIB = C+I+G+(X-M)).
La elaboración de un bien es el resultado de una tecnología, es decir de la aplicación de una combinación determinada de los factores productivos, trabajo, tierra, capital y el factor empresarial.
El factor tierra (productos provenientes de la naturaleza) es remunerado a través de la renta; el factor trabajo (empleados y obreros) son remunerados con sueldos y salarios; el factor capital (maquinaria y equipo, generalmente financiados por el sistema financiero), es remunerado con los intereses y por último el factor empresarial es remunerado mediante el excedente de explotación (podemos asimilarlo como el beneficio).
Cuando la economía crece, las empresas necesitan una mayor cantidad de los factores productivos, por lo tanto, aumenta la remuneración a los factores, o viceversa, mayores niveles de remuneración indican un crecimiento en la economía. Pero el tipo de factor nos puede dar un indicio de si un país busca el desarrollo o simplemente crece.
Por supuesto si el mayor crecimiento del PIB se basa en la remuneración al factor capital, nos está indicando que se está remunerando a la inversión, y esta situación como se detalló en el artículo anterior, aumenta los ingresos futuros y la posibilidad de alcanzar mayores niveles de bienestar. Si está creciendo el excedente de explotación, los empresarios podrán disponer de mayores recursos para la inversión. Un aumento en la remuneración al factor trabajo puede ser indicativo de que una mayor cantidad de personas están obteniendo un ingreso, mejorando así su situación personal.
Las estadísticas del Banco Central nos indican que para el año 2007 los sueldos y salarios aumentaron un 25% con respecto al 2006, y el excedente de explotación creció 23,3% en el mismo lapso.
Finalmente a manera de resumen podemos afirmar que un país para desarrollarse debe en primer lugar crecer, es decir producir cada vez una mayor cantidad de bienes y servicios, lo que conlleva a un aumento en la utilización de los factores productivos, lo que debe repercutir en una mejora en el bienestar de la población. Esta situación sólo se logra aumentando los niveles de inversión en la producción de bienes transables, es decir, de aquellos que se pueden comercializar en el mercado internacional. Dado que un aumento en las exportaciones genera un mayor ingreso de divisas al país, con lo cual el BCV puede emitir más bolívares, los cuales deben representar mayores niveles de ingreso para la población.
Sin embargo estamos observando que en Venezuela el crecimiento económico se está basando en una mayor producción de los productos no transables (no comercializables con el exterior) y que básicamente se destinan al consumo. Sin embargo es justo afirmar que este puede ser un hecho coyuntural, ya que la tendencia que se estaba dando era la de una mayor importación de bienes de capital para la inversión
Con este artículo estamos culminando la serie dedicada al análisis del concepto de crecimiento económico y la variable utilizada para medirlo, el PIB. Esperamos que hayamos cumplido con nuestro objetivo que es la de acercar el conocimiento económico al hombre común, en el proceso que hemos denominado “alfabetización económica” y lograr que la economía esté al alcance de todos.