Corre el año 1878, el hacendado Manuel Antonio Pulido obtiene los derechos
para la explotación de un terreno mineralógico, ubicado en su hacienda cafetera
La Alquitrana tras descubrir emanaciones de petróleo en la superficie. Pulido
funda la compañía Petrolia del Táchira, dando inicio formal a la Venezuela
Petrolera. Si embargo, algunos
autores prefieren, marcar este inicio en el año1914 con el reventón del pozo
Zumaque I, en Mene Grande Edo. Zulia.
La industria
petrolera, principal producto de exportación y primer generador de divisas del
país, ha sido el eje principal en buena parte del discurso de los principales
intelectuales de la Nación, entre los cuales, podemos mencionar: Gumersindo
Torres, Vicente Lecuna, Arturo Uslar Pietri, Asdrúbal Baptista Domingo F. Maza
Zavala, y de políticos como Rómulo Betancourt. Desde los orígenes de la
industria petrolera hasta 1983, época de vacas gordas, provocó un
acelerado progreso económico y comercial
la construcción de una infraestructura moderna, la Consolidación de las
instituciones y el forjamiento de una identidad cultural propia. Después vino un periodo prolongado de vacas flacas,
de crisis de extravíos, de fatalidad todavía vigente a pesar del aumento
descomunal de los precios del petróleo en el mercado internacional, que han
alcanzado y superado los 100 US$/barril. Pero en definitiva, sin el petróleo,
Venezuela sería una sociedad misérrima (Dr. Heraclio E. Atencio Bello.2002)
En Venezuela,
los yacimientos petroleros son propiedad de la República, en el art. 12 de la
Constitución de la República Bolivariana de Venezuela de 1999, se establece: “Los yacimientos mineros y de hidrocarburos
cualquiera sea su naturaleza […] pertenecen a la República, son bienes de
dominio público y, por lo tanto inalienables e imprescriptibles…” Por lo
tanto, la discusión se ha centrado básicamente en a distribución del ingreso
petrolero. El Dr. Domingo F. Maza Zavala, en la conferencia “Los Cambios de
Estructura Económica”, editada por la Academia de Ciencias Económicas (ANCE),
nos señala que se pueden agrupar en dos tesis, las distintas opiniones. La
primera sostiene que el ingreso petrolero es una renta correspondiente a la contribución
de los recursos naturales a la producción de petróleo y que fluye al
propietario de los recursos (el Estado), lo cual trae consecuencias directas en
la economía.
La otra tesis
sostiene que el ingreso petrolero es asimilable a un ingreso de capital o
patrimonial, originado en la liquidación progresiva de un activo natural de la
Nació, propiedad común de los venezolanos, no producible directamente, lo que
obliga a la inversión de la totalidad o la mayor parte de ese ingreso, bien sea en la creación de una
capacidad real de la producción o bien
en el desarrollo humano, que implica la elevación del potencial de la fuerza de
trabajo. (Domingo F. Maza Zavala.2008.ANCE)
Gumersindo
Torres (1875-1947), Ministro de Fomento del General Gómez, fue una de las
primeras voces en tocar este problemática. Torres, estudió el caso de Estados
Unidos en donde existía la propiedad privada de los yacimientos, por lo cual,
se opera sobre la base de arrendamientos, pagándose una renta de la tierra al
terrateniente, independientemente y aparte de cualquier otro impuesto estatal.
En tal sentido propuso que el Estado estableciera el cobro de una de la tierra
en los terrenos nacionales, aparte de los impuestos ya consagrados. (Baptista y
Mommer.2006). El historiador y banquero Vicente Lecuna, (1870-1954) presidente
del Banco de Venezuela para la época, sostenía que la nación tenía que pedir
una renta de la tierra equivalente, como mínimo a lo usual en los EE.UU.
Hasta el
momento, el debate, si se puede decir, estuvo concentrado entre los
especialistas. La gran discusión nacional fue iniciada por el intelectual
Venezolano Arturo Uslar Pietri (1906-2001), quien el 14 de julio de 1936,
publica en el “Diario Ahora” un polémico artículo titulado: “Sembrar el Petróleo”. El
Dr. Silva Michelena comenta al respecto: “En
Venezuela la famosa frase de Uslar Pietri sembrar, el petróleo, lanzada como
lema en 1936, ha visto transcurrir setenta años sin que se haya tenido claridad
sobre el verdadero carácter de esa siembra. No se trata de repartir a todo el
mundo el petróleo, no se trata de hacer demagogia, no se trata de proclamar que
el petróleo va directamente al pueblo. Se trata de comprender que Venezuela,
como país petrolero, debe asumir plenamente esta circunstancia natural, y
buscar activamente la integración productiva y no rentística de la industria a
la economía mundial.” ( Silva Michelena, Héctor. “El pensamiento económico venezolano en el
siglo XX, Un postigo con nubes”.2006) Los Profesores Baptista y Mommer nos
explican el significado inicial que tuvo esta frase para el Dr. Uslar Pietri: “Con una visión reminiscente de la concepción
fisiocrática del mundo económico, caracterizaba allí a la agricultura como
economía reproductiva y progresiva, en tanto que designaban a la minería como
economía destructiva y por consiguiente, efímera” (Baptista, Asdrúbal y
Bernard Mommer.2006). Pero dejemos al propio Uslar Pietri que sea quien nos
explique cual es el significado de la frase: “El tema central de la política económica venezolana puede sintetizar en
esta consigna perentoria: Sembrar el petróleo. Es decir, no abandonarnos a la
poderosa corriente unilateral que constituye la industria petrolera, sino por
el contrario, canalizarla, dirigirla, aprovecharla, para que con su fuerza y
riqueza anime y movilice todas las actividades económicas del paí”s. (Uslar
Pietri, Arturo, “Sumario de Economía
venezolana Para alivio de estudiantes”) (http://nguaramato3.blogspot.com/2009/06/arturo-uslar-pietri.html)
El ex
presidente de Venezuela, Rómulo Betancourt (1908-1981), un verdadero
autodidacta en el tema petrolero, quien le dedico largas horas de estudio, dado
que comprendía la importancia del petróleo en el futuro de Venezuela y autor de
una de las obras más importantes de la historia venezolana en el siglo XX
“Venezuela política y petróleo”, publicada inicialmente en 1956 (en mi
biblioteca tengo la primera edición de 1978 de la editorial Seix Barrral).
Betancourt escribe en las páginas del libro un enumeración de los lineamientos
seguidas por su gobierno en 1948: “1)
Elevación de los impuestos hasta el límite que entonces se consideró razonable,
dentro del sistema capitalista y la
economía de mercado. 2) Concurrencia de Venezuela como entidad autónoma, al mercado
internacional del petróleo vendiendo directamente sus regalías. 3) Cese radical del sistema de
otorgamiento de concesiones a particulares, y planteamiento de una empresa del
Esatdo a la cual se atribuiría la facultad de explotar directamente o mediante
contratos a terceros, las reservas nacionales. 4) Industrialización de la mayor
parte del petróleo venezolano dentro del país, y organización de una refinería
nacional, con capital estatal o mixto. 5) Adecuadas medidas para la
conservación de la riqueza petrolera, típico recurso no renovable; y la
utilización del gas emanado de los pozos que tradicionalmente se venían desperdiciando.
6) Reinversión por las compañías concesionarias de una parte de sus utilidades
en la vitalización y desarrollo de la economía agropecuaria. 7) Mejoras
sustanciales en salarios, prestaciones sociales y condicione de vida y de
trabajo de los obreros, empleados y técnicos
venezolanos al servicio de la industria. 8) Inversión de una cuota elevada
de los ingresos obtenidos de la nueva política impositiva sobre el petróleo en
crear una economía diversificada y propia, netamente venezolana”.(Betancourt.1978)
No hay comentarios:
Publicar un comentario