lunes, 11 de julio de 2011

EL ESTADO DE DERECHO

¿Qué es? ¿Que se entiende por Estado de Derecho? ¿Se está violando el Estado de Derecho? Estas son preguntas que se han puesto a la discusión de la opinión pública con motivo de lo que acontece en las cárceles venezolanas.

En términos muy simples, el Estado de Derecho significa que el Estado está sometido a un conjunto de normas, reglamentos y leyes, que conocidas por todos, permiten prever la acción de los organismos estatales ante situaciones en las cuales utilicen sus poderes coercitivos. De igual forma la existencia del Estado de Derecho permite al ciudadano, en forma individual o colectiva, tomar la(s) acción(es) que considere pertinente, es decir “el Estado debe limitarse a establecer reglas aplicables a tipos generales de situaciones y tiene que conceder libertad a los individuos en todo lo que dependa de las circunstancias de tiempo y lugar, porque sólo los individuos afectados en cada caso pueden conocer plenamente estas circunstancias y adaptar sus acciones a ellas.” (Friedrich A. Hayek, 1944).

Los principios básicos que deben regir la actuación coercitiva del Estado son: i) El derecho sea el principal instrumento de gobierno; ii) la Ley debe ser capaz de guiar la conducta humana y iii) que los poderes la interpreten y la apliquen congruentemente.

Según lo anterior, el Estado de Derecho, desde el punto de vista económico, se viola cuando se cambian constantemente las reglas de juego, ya sea referente a la propiedad de los medios de producción y de la concentración o monopolización del mercado.

Como bien lo indica Hayek, en su libro “Camino de Servidumbre”, se ha impuesto la creencia en que el Estado de Derecho queda salvaguardado si todos los actos del Estado están debidamente autorizados por la legislación vigente, dándose la contradicción de la posible existencia de un Estado cuyos actos son legales, desde el punto de vista jurídico pero, sin embargo, pero no sujeto al Estado de Derecho.

En la historia hay ejemplos sobre lo que se señaló en el párrafo anterior, siendo el más dramático el que dio origen a la segunda Guerra Mundial y que fue el motivo por el cual Hayek se decidió a escribir el libro que lo hizo famoso ante la opinión pública. En sus páginas se puede leer la siguiente conclusión: “El Estado de Derecho implica, pues, un límite a la legislación. Restringe ésta o aquella especie de normas generales que conoce por ley formal y excluye la legislación dirigida directamente a persona en particular o a facultar a alguien en el uso del poder coercitivo del Estado con miras a la discriminación. Significa, no que todo sea regulado por ley, sino, contrariamente, que el poder coercitivo del Estado solo puede usarse en casos definidos de antemano por la ley, y de tal manera puede preverse cómo será usado. Un particular precepto puede, pues, infringir la supremacía de la ley. Todo el que esté dispuesto tendría que afirmar que si el Estado de Derecho prevalece hoy o no en Alemania, Italia o Rusia, depende de que los dictadores hayan obtenido o no su poder absoluto por medios constitucionales.”

Para finalizar citaremos al filósofo ingles “John Locke” (1632-1704): “La finalidad perseguida por las leyes no se cifra en abolir o limitar la libertad, sino, por el contrario, en preservarla y aumentarla. En consecuencia, allí donde existen criaturas capaces de ajustar a normas legales, la ausencia de leyes implica carencia de libertad. Porque la libertad presupone el poder actuar sin someterse a limitaciones y violencias que provienen de otros; y nadie pude eludirlas donde se carecen de leyes. Tampoco la libertad consiste –como se ha dicho- en cada uno haga lo que le plazca (¿Qué hombre sería libre si pudiera señorearle el capricho de cada semejante?) La libertad consiste en disponer y ordenar al antojo de uno su persona, sus acciones,” su patrimonio y cuanto le pertenece, dentro de los límites de las leyes bajo las que el individuo está y, por lo tanto, no en permanecer sujeto a la voluntad arbitraria de otro, sino libre de seguir la propia.”

No hay comentarios: