ECONOMIA AL ALCANCE DE TODOS
Su blog económico, donde usted puede encontrar todo lo que quiere saber sobre economía. Análisis de los hechos para los profesionales.Conceptos, para los estudiantes y el lenguaje claro y sencillo que todos desean leer para comprender lo que esta pasando en nuestra querida Venezuela.
lunes, 12 de diciembre de 2016
lunes, 27 de junio de 2016
RELATOS DE INFLACION Y ESCASEZ
Hace algunos años, discutiendo con
unos amigos la situación inflacionaria de Argentina, un ex embajador nos relató
una experiencia personal. Al llegar a Buenos Aires, se dispuso a tomar un taxi,
el chofer después de convenir el precio del servicio le solicitó dos favores al
embajador, que le pagara la carrera por adelantado y que le permitiera camino
al hotel hacer una breve parada para comprar los comestibles del día (los
precios se modificaban constantemente).
Esta historia me indicó claramente la
tensión psicológica que estaban viviendo los argentinos. Nunca pensé que
estaríamos en una situación semejante. A continuación les presento tres breves
relatos, que al estilo del narrado por el embajador intenta presentar una cruda
realidad.
Son las nueve de la noche, María Antonia
se prepara para ir al supermercado, si, a esa hora se dispone a realizar sus
compras semanales (según el número terminal de su cédula de identidad, le toca
al día siguiente), pero no va sola, van con un grupo de amigas que han formado una
especie de club de compra a través de las redes sociales. La inseguridad le
obliga a ir en grupo, ni loca anda sola
Se viste con la ropa cómoda, ya que
va a pasar toda la noche, a las 10 pm
comienzan a hacer la lista, a las 12 reparten el número, de acuerdo a la lista,
para comprar al día siguiente. Hoy una del grupo la llamó para informarle que
había llegado un camión cargado de harina de maíz, aceite y mantequilla,
artículos que tienen tiempo desaparecidos de su mesa diaria, reza para poder
adquirirlos, pero no se hace muchas ilusiones, hace tiempo que compra lo que
llegue, no lo que quiere.
Últimamente tiene que ingeniárselas
para ver que le hace de comer a su familia, Sobre todo con que sustituir la
proteína animal (carne de res, pollo, huevos, etc.) Ha tenido que reducir el
tamaño de la ración y el número de comidas a dos, generalmente sacrificando la
cena.
Las compras las hace fundamentalmente a
diario a precios no regulados, lo que representa un golpe muy duro a su
bolsillo, lo precios se ajustan semanalmente o una frecuencia menor. La semana
pasada estuvo haciendo la cola durante 14 horas y solo pudo adquirir 2 botellas
pequeñas de aceite de maíz, espera que
hoy sea diferente.
Ana julia es una joven madre, ayer tuvo
una reunión en el colegio donde tiene a sus dos hijos estudiando, uno en preescolar
y el otro en 3er grado, Le informaron que la mensualidad sería ajustada para el
año escolar que viene, pasaría de Bs. 2.000 a Bs. 7.000, lo que representa un
150% de aumento, o Bs. 5.000 adicionales c/u, A esto se le suman los aumentos
generalizados en los productos que se venden en la cantina escolar, un desayuno
de dudosa calidad le cuesta Bs. 500.o más.
Está preocupada por que no sabe si
tendrá los recursos necesarios para adquirir el uniforme y útiles para el
futuro año escolar, un par de zapatos están rondando los Bs. 15.000, un mono
pantalón: Bs. 5000; un pantalón Bs. 6.000, camisa: Bs. 3.500, un morral puede
superar los 10.000, etc.
En síntesis, calcula que necesitará
más de Bs. 100.000 o 6,66 salarios básicos por cada uno, para los gastos
escolares, y no los tiene ¿Qué va a hacer? no lo sabe.
Francisco tiene un familiar que padece
una enfermedad neurológica degenerativa, incurable, pero que tiene un
tratamiento farmacológico que le permite cierta calidad de vida, pero no los
consigue, no hay. Ya ha visto cierto deterioro en su salud, el cual puede ser
mayor a medida que pase el tiempo sin consumir el medicamento. El médico no
puede ayudarlo, lo que les dice es que trate de buscar las medicinas, tiene a
toda la familia en eso, pero es que su
tío necesita la de la tensión, su primo la de la diabetes, su esposa la de la
migraña. Ya se conoce todas las farmacias de su ciudad, inclusive se ha vuelto
asiduo a las redes sociales donde han proliferado los grupos en busca de
medicinas. Solo le queda rezar para que sus familiares aguanten
lunes, 30 de mayo de 2016
EL CONO MONETARIO
La función principal de la moneda es
servir como medio de pago facilitando las transacciones comerciales. En una
economía sana el monto global del dinero en circulación debe estar acorde con
la actividad económica, si la cantidad de efectivo en circulación es menor a las necesidades, la actividad
económica puede dificultarse, si es mayor causa inflación.
Por esta razón el Banco Central de Venezuela
tiene entre sus funciones controlar los niveles de liquidez en la economía.
Adicionalmente a la cantidad en
circulación hay que tomar en cuenta al cono monetario, es decir, a los
diferentes valores de la moneda puestos en circulación procurando una relación
directa con los precios de los productos, por ejemplo, si es común que los
precios tengan decimales, en nuestro caso lo llamamos “céntimos”, es usual que
se emitan monedas de bajo valor para el pago de estos. En Venezuela el cono
monetario del Bolívar está conformado por billetes de: Bs. 100; 50; 20; 10; 5;
2; y monedas de: Bs.1; 50 céntimos; 25 Cts.; 12,5 Cts.; 10 Cts.; 5 Cts. y 1
céntimo.
Como se mencionó, la elección de una
adecuada combinación de los valores que
se emiten de la moneda oficial, facilita el intercambio de bienes y servicios Un cono conformado por
pocos valores puede causar incomodidades para pagar el monto exacto o recibir
el vuelto en caso de que se pague con un monto mayor, Pero la atención se
intensifica por parte de la autoridad monetaria cuando la moneda pierde su
valor a causa de un proceso inflacionario. Cada vez se requieren billetes de mayor
valor. Por ejemplo. En Venezuela no se realiza ningún ajuste del cono desde el
año 2008, cuando se implantó el proceso
de reconversión monetaria. Período en el cual se ha registrado el mayor aumento
de los precios en la historia del país. Suponiendo que un que una persona
necesita un promedio de Bs. 5.000 para sus transacciones diarias (a modo de
referencia, un Kg. de carne está rondando los 4.000 Bs.) requiere un mínimo de
50 billetes de Bs. 100, cantidad que a todas luces resulta incómodo para su
manejo. Ya los bancos reportan escasez de billetes de 100 y 50 bolívares, los
cajeros automáticos no se dan abasto para suministrar el efectivo y lo más
grave, es una tentación para los ladrones.
Ya es tiempo que se realice un ajuste
al cono monetario y se emitan billetes de más alta denominación (Bs. 500, Bs.
1.000) La principal excusa para no realizar una emisión de billetes de más alto
valor, es el efecto psicológico que pueda tener la emisión sobre la población.
Algunos piensan que es validar el proceso inflacionario. El consumidor se
siente más pobre al ver reducirse su ingreso, pero es que esta situación ya se
dio, el venezolano está pensando en términos
reales, cuantos kilos de carne, cuanta leche, puede adquirir, Es decir el
efecto inflación ya está dado, lo que queda es facilitar las transacciones y el diseño de un cono
monetario adecuado contribuye con ello.
jueves, 5 de mayo de 2016
LOS PRIMEROS EN LLEGAR
La principal crítica que se le realiza
a la economía de mercado, como sistema de distribución, es la injusticia y su carácter
excluyente. Solo los que puedan pagar pueden adquirir el producto, sin embargo,
a pesar de que se ha satanizado este modelo, en Venezuela poco ha funcionado,
aquí el mercado, por su tamaño, ha trabajado oligopólicamente (con una gran
participación de empresas públicas), pocas compañías han sido suficientes para
la producción y distribución de bienes y servicios pero a precios mayores al del
mercado.
Son
varias las soluciones que se han planteado para solventar este problema;
subsidios directos, control de precios etc.
Esta última ha sido la más aplicada a pesar de los efectos colaterales
que conlleva su aplicación, estamos hablando de la escasez, el cual venía
siendo atacado mediante las importaciones, gracias a la gran liquidez que nos
generaba la renta petrolera.
Recordemos
que en un sistema de control de precios,, generalmente los precios son fijados
unilateralmente, por funcionarios que desconocen el sector. Los precios son
fijados por debajo de los de mercado, en
procura de beneficiar al consumidor. En el corto plazo este control beneficia a
las empresas grandes que trabajan con costos promedios menores. Empresas pequeñas tenderán a cerrar
sus puertas. ante la imposibilidad de producir a esos precios. Esto hace que se
reduzca la oferta aumentando la escasez y la presión inflacionaria.
La
caída de los precios de la cesta petrolera puso al descubierto nuestra gran
debilidad estructural, acentuando los problemas de escasez, ahora acompañado de
un serio proceso inflacionario.
Ante
esta situación el gobierno reaccionó aumentando los controles de precios ahora,
acompañados de controles en las cantidades El Estado Aumentó su presencia en la
economía a través de expropiaciones de empresas que dejaron de ser rentables.
Surge un aumento inusitado de la demanda que la oferta no puede satisfacer, los
consumidores hacen cola a las puertas de los establecimientos con la esperanza
de poder adquirir los productos de su dieta diaria.. Solo tienen que ser los
primeros en llegar.
Este
nuevo modelo de distribución posee las siguientes características:
-
Presencia importante del Estado, en
las decisiones de producción y consumo.
-
El precio de venta es menor al del
mercado y no contempla el costo de oportunidad del consumidor, es decir el
costo (ingresos dejados de percibir, disminución de ls productividad laboral de
etc.) perder 4 o 6 horas en las colas. Tampoco contempla el aumento de la
burocracia
-
Uso de
las redes sociales para la ubicación de los productos.
-
Surgimiento de importante mercado negro
o paralelo con precios mayores a los de mercado
-
Se forma una importante actividad de
trueque.
-
El límite diario de productos a la
venta determinará quienes podrán adquirir el producto, los primeros en la fila,
los primeros en llegar
jueves, 14 de abril de 2016
HACEN FALTA DOLARES
La caída de los precios del petróleo, ha servido de detonante a la más
grande crisis económica vivida por el país en los últimos años.
La merma de los ingresos en divisas ha puesto en evidencia nuestra
debilidad estructural al depender de un
solo producto de exportación y de la renta que este produce. En términos
financieros, tenemos un problema de liquidez, no alcanzan las divisas que conforman
las Reservas Internacionales para cubrir
las necesidades de materia prima, insumos y productos terminados, que se
requieren para la puesta en marcha del aparato productivo nacional.
Tener pocos dólares obliga a discriminar su entrega perjudicando a
muchos sectores de la economía. Lo que inicialmente fue una medida de poder,
como es el régimen cambiario, Hoy, se ha convertido en la principal fuente de
corrupción, que como un cáncer, está socavando la política económica del
gobierno e impidiendo que el tipo de cambio cumpla su función natural, equilibrar
el comercio internacional, por lo tanto la solución del problema pasa por la
modificación gradual del régimen cambiario
Como todo problema de iliquidez, se hace necesario en el corto plazo la
búsqueda de efectivo, en nuestro caso de divisas, que restituya el flujo de
importaciones que requiere el país Hay
que dejar de lado esa camisa de fuerza ideológica y acudir a organismos
multilaterales creados para este fin, como es el caso del Fondo Monetario
Internacional, que nos suministren en
calidad de préstamo, los dólares
necesarios para reforzar las Reservas Internacionales y así poder afrontar el
grave problema de la balanza de pagos
De la misma forma hay que reestructurar el servicio de la deuda pública
externa para mejorar el cronograma de pagos. Hay que plantear una política
fiscal seria y responsable, que logre el desarrollo de una industria nacional
exportadora que genere una cantidad de divisas que permita el autosustento
cambiario del sector privado.
La solución del problema no es fácil, lleva tiempo, pero hay que
afrontarlo. Ya otros países, muchos amigos nuestros, han transitado este camino
y han podido salir de él, así que no es imposible, solo falta determinación y
compromiso y un poco de sentido común.
miércoles, 30 de marzo de 2016
NO HAY MAL QUE DURE CIEN AÑOS
Para
serles sincero estoy asustado. La crisis económica y social que estamos
viviendo está alcanzando niveles inaguantables.
La
confiscación masiva a nuestros ingresos
mediante la inflación, cada día nos empobrece más. Las personas que como yo
dependemos de un ingreso fijo, no tenemos forma de defendernos, somos simples espectadores
de la pérdida de nuestro poder
adquisitivo y por ende, la
pérdida de nuestra calidad de vida.
Aunque
el gobierno ha realizado ajustes al sueldo mínimo pretendiendo que este sirva
de referencia, estos se han visto insuficientes para compensar el aumento de
los precios, los cuales según información oficial del Banco Central de
Venezuela en el año 2015 se elevaron un 180,9%, variación muy superior a la
aplicada al sueldo mínimo. según los datos proporcionados por el Centro de
Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros
(Cendas), la canasta básica alimentaria
aumentó a 176 mil 975 bolívares en febrero de 2016, más de 15 salarios
básicos ( Bs.11.577). Lo que actualmente una familia de 5 personas gasta en una
cena ligera (pan, queso, jamón y jugo), hasta hace poco equivalía al gasto en
un mercado quincenal
Todo
el que puede, en especial los trabajadores independientes: electricistas,
mecánicos, plomeros, Etc., ajustan el valor de sus servicios (tiemblo cada vez
que algún artefacto se me daña en la casa) estimulando la inflación..
Por
mucho que haya leído sobre los fenómenos inflacionarios en Argentina, Brasil o
Bolivia, nunca pensé que iba a experimentar en carne propia las nefastas
consecuencias de tan devastador problema.
El
asunto se agrava si le sumamos el problema de la escasez. Mi esposa le dedica
hasta 8 horas diarias, cuando le toca, a hacer colas sin garantía de poder
adquirir algún producto. En esta situación han servido de mucha ayuda las
redes sociales, donde se intercambian información
sobre la existencia de productos en los supermercados de la localidad, Es
importante destacar la dificultad de conseguir proteínas, afectándose la
nutrición de la familia. Comemos lo que podemos no lo que queremos
Sufro
una enfermedad bastante incapacitante pero que responde satisfactoriamente a
tratamiento farmacológico, pero no se consiguen las pastillas, están
desaparecidas del mercado local, tengo a toda (literalmente) mi familia
buscándolas, y no se consiguen o cuando aparece alguna cantidad en alguna
farmacia desaparecen rápidamente de los estantes, y mientras tanto, la salud
decayendo.
Si
esta situación por si sola es traumática, hay que agregarle el problema de la
delincuencia, Yo vivo desde hace 20 años en una de las ciudades dormitorio que
forman la Gran Caracas. Cuando me mudé este era un oasis de tranquilidad pero
se ha vuelto el paraíso de la delincuencia, Todos los días se reportan entre 2
o 3 asaltos (número que aumenta si
adicionamos los que no se reportan) a peatones por motorizados armados
(generalmente están en pareja). A los tradicionales robos de celulares y
carteras, se le ha sumado el robo de comida. Da temor salir de la casa y ya uno tiene que andar en harapos
para no llamar la atención de los delincuentes. Se ha generado un nuevo trauma,
uno tiembla si escucha una moto detrás de uno.
Entre
la inflación y la delincuencia estoy con
los pelos de punta y sé que es un sentimiento generalizado, solo espero que
esta situación pase rápidamente. No hay mal que dure cien años ni cuerpo que lo
aguante.
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