miércoles, 27 de agosto de 2014

DEFICIT FISCAL E INFLACION

Hay un consenso sobre la relación que existe entre la emisión de dinero inorgánico motivado a los déficits  fiscales y la inflación. Repasemos una vez más como se origina esta relación
Cuando se formula el presupuesto público, el primer paso es determinar la política económica que va a orientar el gasto: estímulo a la vivienda, a la educación a la infraestructura pública, etc.
En segundo lugar se procede a determinar el monto del gasto público. En Venezuela el gasto es muy rígido ya que las erogaciones en sueldos y salarios, las transferencias por “Situado Constitucional” (20% de los ingresos ordinarios)  y el servicio de La deuda pública, dejan muy poco espacio para la ejecución de políticas económicas.
Una vez determinado el gasto se procede a determinar los ingresos que permitan financiar el gasto presupuestado. De tal manera que se calculan los ingresos por impuestos (de la renta, valor agregado etc.) y tasas y aranceles (ingresos por concepto de los servicios que presta el gobierno). En este punto se determina el superávit (ingresos mayores que el gato) o el déficit (gasto mayor que los ingresos).
En caso de tener un déficit, se ve la manera en que se puede financiar este exceso de gasto. Lo normal es pedir prestado al sector privado. Este endeudamiento se realiza a través de la emisión de bonos. Este mecanismo de financiamiento es bastante usado, pero, hay que tener cuidado que el servicio de la deuda pública sea manejable y no comprometa en alto grado presupuestos futuros.
El financiamiento a través de la emisión de deuda pública no es inflacionario, siempre y cuando sea adquirida por el sector financiero privado, ya que este dinero se origina en la actividad económica del país. En nuestro caso proviene de la actividad petrolera, cuando se exporta un barril petrolero y los dólares obtenidos se venden al BCV, el instituto emisor, le acredita a una cuenta de PDVSA, la cantidad de Bolívares equivalente  según el tipo de cambio vigente para la fecha (6,2842 Bs/US$). En otras palabras, cada 6,28 Bs. están respaldados con un dólar que forma parte de las reservas internacionales.  Estos bolívares entran en la economía cuando PDVSA paga los sueldos y salarios, le paga a sus proveedores y cancela sus impuestos. Este dinero es el llamado orgánico o con respaldo.
Situación diferente es cuando los bonos son comprados por el Banco Central. Este al adquirir un bono de la deuda, mediante un asiento contable, acredita el monto correspondiente a la operación en bolívares en la cuenta del Tesoro Nacional, crea  dinero, el gobierno puede sacar a la calle una cantidad de bolívares  que no provienen de la actividad productiva. De tal forma, con la adquisición de los bonos por el Banco Central, de repente hay unos bolívares en la economía que no tienen ningún respaldo. Es dinero inorgánico.
Al no ser producto de la actividad económica, este dinero es potencialmente inflacionario, ya que aumenta la cantidad de dinero en la calle manteniendo la misma cantidad de bienes y servicios, lo que presiona los precios al alza.
En sentido estricto lo que genera inflación no es el déficit como tal, sino la forma en que es financiado
Esta es la razón básica por la cual se debe evitar que el Banco Central financie los déficits públicos, como lo estipula la Constitución. Aunque, una administración seria trataría de manejar presupuestos equilibrados, centrándose en dos componentes: el tamaño del Estado y el monto de la deuda pública.
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lunes, 25 de agosto de 2014

ADIOS A UN BUEN AMIGO



La semana pasada me enteré del fallecimiento de un buen amigo, el Dr. Carmelo Paíva Palacios. A pesar del  poco tiempo que nos conocimos, nació entre los dos una sincera amistad.

Iniciaba mis andanzas gremialistas, en el 2005, cuando me enteré de que el Núcleo de Economistas del Banco Central de Venezuela cumpliría 35 años de fundada. Quise conocer todos los pormenores de la fundación del Núcleo, por lo cual inicié mis investigaciones. Cada vez que preguntaba algo surgía la misma frase: “pregúntale a Carmelo Paíva en la Asociación de jubilados.

Así que siguiendo las recomendaciones me dirigí a la antigua sede de la Asociación en el piso 14 de la Torre Financiera, y para mi fortuna lo encontré en franca conversación con otros jubilados. Ese día conseguí un colaborador y cómplice en mis quehaceres editoriales, pero sobre todo conseguí un amigo.

Carmelo Paíva Palacios, nació en Mamporal, hijo de Justo Rosendo Paíva y Ascensión Palacios de Paíva. Economista Egresado de la Universidad Santa María en 1968, con estudios de post grado y especialización cursados en la Fundación Getulio Vargas (Brasil) y en la Universidad Central de Venezuela.

Fue profesor jubilado de la Universidad Central de Venezuela y economista jubilado del Banco Central de Venezuela. En el gremio de los economistas ha sido miembro de la Junta Directiva y del Tribunal disciplinario del Colegio del distrito Federal y Estado Miranda; de la Contraloría de la Federación de Colegios de Economista de Venezuela; del Directorio de IMPRECONOMISTA; del Directorio Académico de INDEPEC. Miembro del consejo de redacción de la Revista “Actualidad Económica” y director de la revista “Enfoque Económico”.

Participó en el Primer congreso de Economistas de Países del Área Andina (Ecuador 1977); en el VI Congreso Mundial de Economista (México, 1980); Miembro del Comité organizador de IV Congreso de Economistas de Países del Área Andina (caracas, 1986; y el III Congreso de Asociación de Economistas de América Latina y el Caribe (Cuba, 1987).

Carmelo fue sobre todo un historiador, uno muy particular ya que centró sus escritos en dos grandes temas: su querida Mamporal y el gremio de los economistas en Venezuela, a tal punto que yo me refería a él como el cronista del gremio.

Fue  autor entre otro textos de: “Biografía de Eulalia Buroz”; “El Colegio de economistas de Venezuela (1953-1968) Síntesis de su historia de quince años”; “25 años una Asociación con Mayúsculas”; “Tacarigua de Mamporal, Noticias acerca de su historia centenaria”; “Mamporal En Retazos del Recuerdo”; “La Negra Hipólita Nodriza del libertador”, “San José de la Sabana Parroquia Religiosa Historia de un pueblo del Litoral Central” y “Efemérides Económicas”, obra a la cual Carmelo le ha dedicó toda su vida profesional.

Padre de cinco hijos, todos varones y excelentes profesionales, grande es la pérdida, y profunda la huella que deja Carmelo Paíva en el gremio de los economistas.

Adiós querido amigo

Paz a sus restos

domingo, 17 de agosto de 2014

LA RECONVERSION MONETARIA ¿ÉXITO O FRACASO?

Según el Decreto con Rango, Valor y Fuerza de Ley de Reconversión Monetaria, a partir del 1ro de enero de 2008, comenzó la circulación de una nueva moneda en el territorio nacional, el “Bolívar Fuerte”, equivalente a 1.000 bolívares.

Los objetivos que se pretendían alcanzar con el proceso de reconversión implementado eran: 1.-   Recuperar el poder adquisitivo de la moneda.  2.-   Reducir la tenencia per cápita de papel moneda. 3.-   Simplificar el cómputo de las transacciones económicas y los manejos financieros y presupuestarios del país.

A seis años de haberse implementado esta medida, ¿Habrá sido un éxito o fracaso? Analicemos si se alcanzaron los objetivos propuestos:

El primer objetivo, la recuperación del poder adquisitivo de la moneda está estrechamente ligado a la disminución de la inflación. Diversos analistas habían advertido que la creación de una nueva moneda por si sola era una medida insuficiente. Desde enero de 2008 hasta mayo de 2014, el Índice Nacional de Precios al Consumidor paso de 103.1 a 612,6, lo que representa un incremento de 494,18%. Como se puede deducir, el proceso de reconversión monetaria no  pudo evitar el proceso inflacionario.

Esto nos lleva al segundo objetivo, la reducción de la tenencia per cápita de papel moneda. Este objetivo  tampoco se ha logrado. Hoy día los requerimientos de billetes en efectivo para las transacciones diarias, es tan alto como cuando se inició el proceso. A esto se le une el hecho de la demora en tomar la medida de poner en circulación billetes con denominaciones mayores a Bs. 100. Ejemplo de lo que se señala, es el retiro en efectivo en un cajero automático. Es bastante incómodo.

En cuanto al tercer objetivo, la simplificación de los cómputos de las transacciones, es el que en mayor proporción se  alcanzó. Aunque hay que destacar el hecho de lo lento que resultó que la población se adaptara a la nueva moneda. Todavía hay personas que convierten la moneda actual a la antigua: ¿son de los de ahora  o de los antiguos? preguntan al realizar una transacción comercial.


De lo mencionado anteriormente se puede deducir que el proceso de reconversión monetaria en Venezuela fue un fracaso, el cual puede ser consecuencia de no haberlo  acompañado de políticas de control de la inflación, en especial, medidas que controlen el aumento del dinero en la calle, la liquidez monetaria (M2) pasó de 176.567.542 miles de Bs. En enero de 2008 a 1.297.987.297 miles de Bs. en mayo de 2014, lo que representa un aumento del 658%. Sin embargo,  hay que admitir que más temprano que tarde (dado el aumento de los precios) hubiera sido necesario haber implementado un proceso de reconversión monetaria. La lección es que la inflación solo se detiene con una política monetaria seria, unida a una política fiscal que  se fundamente en el equilibrio fiscal.

miércoles, 6 de agosto de 2014

PRINCIPIOS

Hay rumores de que el gobierno está negociando un préstamo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). De ser esto verdad ¿Por qué un gobierno que ha criticado tanto la actuación de este organismo Internacional, tiene a necesidad de sentarse con él a discutir la posibilidad de un préstamo?

La razón la encontramos en la violación sistemática de unos principios económicos que han demostrado a lo largo de la historia de la humanidad su validez y la grave consecuencia que trae ignorarlos. En este artículo nos centraremos en los tres principales: Fomento de un sector privado sólido y floreciente; equilibrio fiscal y una tasa de cambio competitiva.

El primero: el fomento de un sólido sector privado es el fundamento para lograr una producción de bienes y servicios que satisfaga las necesidades de la población. El sector privado ha demostrado su eficiencia y dinamismo. Un sector privado sano, es el principal generador de riqueza, creador de fuentes de empleo, y fuente de ingresos al gobierno, vía impuestos. Generalmente el sector privado es más eficiente que el Estado para producir y distribuir los bienes y servicios, y estos es así, ya que el precio que se paga por el fracaso es mayor en el sector privado, la quiebra. Economías comunistas como la cubana y la china están abriendo al capital privado sus medios de producción. Según el Banco Mundial, los mercados privados estimulan el crecimiento económico gracias a que aprovechan la iniciativa y las inversiones para crear empleos productivos y aumentar los ingresos. (http://datos.bancomundial.org/tema/sector-privado). El desestimulo al sector privado ha demostrado que provoca caídas en la producción, caídas en las exportaciones y retraso tecnológico entre otros aspectos.

El segundo principio, el de equilibrio fiscal, simplemente nos indica que un gobierno al igual que una persona, no puede gastar más de lo que le ingresa. Esta situación no es sostenible en el tiempo y es la principal causa de inflación. Un gobierno puede incurrir en un gasto solo si tiene medios para financiarlo, el cual puede consistir en ingresos corrientes (Impuestos y tasas), ingresos extraordinarios y préstamos. A medida que va creciendo el gasto y se agotan las fuentes de financiamiento, crece la tentación de que sea el Banco Central el que otorgue los préstamos, mediante la venta de bonos, con lo cual saca dinero inorgánico, o sin respaldo monetario a la calle, presionando al alza de los precios (hay más dinero e igual número de bienes y servicio que adquirir). Lo básico es una administración sana del presupuesto público, para lo cual es necesario un sistema contralor independiente que con rigurosidad supervise las cuentas del sector público. En Venezuela  la Constitución prohíbe expresamente el financiamiento por parte del BCV al déficit público.

En tercer lugar tenemos que mantener una tasa de cambio competitiva. Esto se refiere al comportamiento en los mercados internacionales. El comercio de bienes y servicios  debe ser transparente, fluido y sin limitantes. Factor vital es el régimen cambiario que se establezca. U tipo de cambio sobrevalorado (vale más del precio a que se negocia), estimula las importaciones, uno subvalorado (vale menos del precio a que se negocia) estimula las exportaciones, el tipo de cambio de equilibrio es fijado por el mercado, en el caso  de que se permita su funcionamiento. En el caso de la sobrevaloración puede traer como consecuencia una demanda excesiva de divisas que genera un desequilibrio en la balanza de pagos y que compromete las reservas internacionales. Para este caso es que presta el FMI, para fortalecer las reservas internacionales. Así que este es un préstamo al instituto emisor y no para el gobierno, aunque en su negociación estén involucrados todos los hacedores de política del gobierno.

Las medidas necesarias para restablecer los equilibrios pueden resultar muy duras, pero esta es la consecuencia de no haberle parado a unos principios económicos básicos, es como aquella persona que quiere irse de parranda todos los días, fuma y bebe en exceso y después no quiere enfermarse y hacer los correctivos necesarios, y más aún, no quiere parar la fiesta.